MAYO 2023
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Número de Catálogo: (16)-6.37b3-483
El huehuentón es el personaje central de los rituales que
los mazatecos llevan a cabo entre el 26 de octubre y el 5 de noviembre,
aproximadamente, para recibir cada año a sus antepasados en las comunidades. Su
nombre es un término que deriva de la palabra nahua huehue, cuyo significado es
viejo o ancestro, el cual es utilizado para identificar a los miembros de las
poblaciones dedicados a representar o encarnar a dichos seres. También se les
conoce como ch´a so h´o, en mazateco, mientras que
bajo el signo del catolicismo son identificados con los muertos, los espíritus,
los angelitos o las ánimas de quienes que fallecieron en el pasado.
En Huautla de Jiménez, población ubicada en las tierras
altas de la sierra norte de Oaxaca, S´ui K´ien es la celebración en la que los huehuentones
toman las calles, casas, templos y panteones para disfrutar y compartir estos
días con sus familiares, amigos y el resto del pueblo. En algunos lugares la
creencia local dice que llegan a la región por el oriente, mientras que, en
Huautla, la gente se da cita en el centro del panteón para recibirlos, en medio
de una ceremonia que es acompañada de rezos, cantos, música y bailes.
Entre los huehuentones predomina la representación de ancestros varones, pero también la de algunos personajes femeninos, los cuales son asumidos por hombres ataviados con ropa de mujer. Cuando se reúnen participan fundamentalmente jóvenes y adultos, aunque también suele verse en medio de los grupos algunos niños o ancianos usando dicha indumentaria.
La máscara que aquí se muestra es una pieza con expresión plástica
realista que corresponde a un huehuentón de Huautla de Jiménez. Es una careta antropomorfa,
sin pintura, labrada en una madera muy suave y ligera, que exhibe los rasgos de
un rostro masculino de edad avanzada, casi senil. Es una pieza que fue excavada
por la parte trasera con azuela y navaja, para delinear los rasgos de la boca, ojos
y nariz; en tanto que en la faz del rostro destaca una frente mediana y lisa, los
pómulos ligeramente resaltados, la barbilla discretamente pronunciada y el labrado
explícito de las orejas, párpados, nariz y dientes. La máscara luce, además,
unas cerdas de fibras naturales color crema, utilizadas para confeccionar el
bigote, las cejas y un par de mechones colocados a la altura de la sien.
Dr. Miguel Ángel Rubio
Curador-investigador, MNA
